Breve introducción al blog

Inicio por aquí :)

¡Hola vividores!

Podéis llamarme Rodre. En realidad mi nombre es compuesto, pero no me gusta tener nombre de virgen (aún así queda chulo decir "L.A. yeah, that's my second name")

Nací para conocer. Se conoce mediante la experiencia y ésta te la da la vida. En resumen, nací para vivir. Pero hay muchas maneras de hacerlo y a mí me gusta viajar, la fotografía y las galletas, es lo que hay.

Soy un bípedo implume y le busco lógica a todo, pero mas bien mi mente lo centrifuga todo hasta hacer que pierda sentido. Una locura.

Tengo otro blog, el de "Hoy me siento feliz" pero este es diferente. Es mucho más personal, es posible que ya te hayas dado cuenta de que desvarío, puede ser que sea porque estoy un poco loca.

¡Espero que disfrutéis! :)

sábado, 31 de diciembre de 2011

Propósitos de año nuevo

La vida cambia. Y con ella o por ella las personas también cambiamos. Cambiamos nuestras costumbres, nuestros vicios, nuestras aficiones y así poco a poco nos vamos forjando a nosotros mismos en una obra que no tiene fin. Una idea que ronda la cabeza desde hace días, un amor cuya llama se extinguió. A pesar de los grandes momentos de euforia, ahora, unida a la economía, esa llama está en recesión. Tal vez se absorbió demasiado el oxígeno o el aire se tornó húmedo de repente y eso la hizo brillar menos. Pero todo tiene solución, ahora, más que nunca, es tiempo de cambiar. De rectificar errores, definir trazos, tomar costumbres y de cambiar.
No se les puede llamar propósitos de año nuevo porque quiero que esto dure más, mucho más de un año. Por lo tanto, se le puede llamar propósitos de cambio. De cambio para mejor, de cambio para encontrar de nuevo, una vez más la claridad  de la felicidad.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Another rock and roll christmas

Rise your glass if you're happy right now, and rise it even higher if you are not happy but you feel like soon you're going to be.
Rise your glass for your family even if you’re far away from home and you won’t be able to meet them now, rise it for the ones who are gone and for those who are coming. 
Rise your glass for the friendship, for the friends you had, you have and you'll have.
Rise your glass for the love, for the lovers and the break hearts, because now is time to hug them all and wish them the best for their entire lives.
And don’t forget to rise it too in your own honor for being who and how you are, for your health and for your future.
I know we should do it every day, but christmas is a time that remind us to remember and rise our glass for the world and for the life.

Merry chrsitmas to everybody! J

Alza tu copa si eres feliz ahora, y álzala aún más si no eres feliz, pero sientes que pronto lo serás.
Alza tu copa por tu familia, incluso si estás lejos de casa y no será posible que os veáis en éstas fechas, alza también tu copa en memoria de los que se han ido y para celebrar a los que están por venir.
Alza tu copa por la amistad, por los amigos que tuviste, por los que tienes y por los que tendrás.
Alza tu copa por el amor, por los amantes y por los que tienen el corazón roto, porque ahora es tiempo de abrazarlos a todos y desearles lo mejor para el resto de sus vidas.
Y que no se te olvide alzar tu copa también en honor a ti mismo por ser quien y como eres, por tu salud y por el futuro que te espera.

Esto deberíamos hacerlo todos los días, pero en navidad es un tiempo para que dediquemos a pensar en cómo somos, qué queremos y alzar nuestra copa en salud del mundo y de la vida.

¡Feliz navidad a todos! J







Nota: Esta entrada también aparece exactamente igual en mi otro blog “Hoy Me Siento Feliz” porque realmente es así como estoy hoy y es esta mi manera de celebrar la navidad en el movimiento blogger. Esto va a seguir funcionando durante todo el 2012, y de hecho cada día se me ocurren más y más cosas que añadir en este blog (y en el otro también). Bueno, como ya he dicho feliz navidad, generalizo un poco más y os deseo unas muy felices fiestas. ¡¡A disfrutar!!

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Está cordialmente invitado al desmoronamiento de la familia


El problema ya venía de antes, pero fue en verano cuando se lo dijeron, cuando los hechos que llevaban tanto tiempo ensombreciendo la relación definitivamente confirmaron lo que todos se temían.
Asistió, como en una película, sin ser capaz de intervenir a la división definitiva de una roca que hacía ya mucho que se veía agrietada. No recordaba las palabras exactas, pero sí que se acordaba de un enorme golpe en el pecho y un vacío inmenso después que provocó que sus ojos quisieran llorar, y también recordó cómo se contuvo; se metió en su cuarto, pero aún no podía permitirse llorar. Quedó con sus amigos y sólo cuando, tras un  rato estando ausente ellos le insistieron en contarle qué pasaba, sólo cuando lo contó y se dio cuenta de la auténtica realidad la voz le tembló y ésta vez no contuvo las lágrimas. Ya no tenía solución ni marcha atrás, era definitivo. Como una bola de masa que se te atasca en el pecho al tragar, ese problema no le afectaba en su día a día, pero sí que lo sentía ahí cuando a veces quería tener algo que nunca se paró a disfrutar porque pensó que siempre estaría ahí,  y recordarlo le hacía  irritar.
Desde entonces, siempre se mostraba algo más lejana respecto a los problemas en general. Se encerró en su burbuja y se refugió en las estrellas artificiales de su habitación. Siguió adelante intentando demostrar ser fuerte aún sabiéndose hecha trizas en su interior. Ya no sentía nada cuando se daban voces y no le daba sensación de vacío el silencio que quedaba tras los portazos, simplemente le daba igual, asistía al espectáculo salvaje de la convivencia demostrando su impotencia autoimpuesta para sobrevivir. Pero ese muro ya casi se había olvidado dos años más tarde, consciente de la pasividad de su padre y la sobreprotectora independencia de su madre. Notó una enorme cavidad en su  interior, un lugar que parecía no estar ahí asta que se notaban los tornados que se formaban. Como una tempestad, porque por muy fuerte que sea el muro, o mucho que intervenga el hombre jamás podrá evitar la tormenta, nunca podrá agarrarla con sus manos y expulsarla para siempre, tan sólo le quedaba aprender a convivir en época de tempestades. 

Nota: Ésta es una entrada muy muy muy personal. He estado dudando mucho rato si publicarla o dejarla como borrador hasta olvidar su existencia. Pero tal  vez la única manera de salir de esta cárcel sea contarlo abiertamente a lectores anónimos. He de confesar que ahora tan sólo hay rayos y truenos en esa oquedad, pero hará como mucho una semana descubrí una canción que me tocó el muro, o más bien me lo derrumbó. Me sentí completamente correspondida con Jules Lennon al escuchar la canción de "Hey Jude", escrita por Paul para el hijo olvidado de John. Para que luego digan que es fácil ser hijo y lo complicado es ser padre.

martes, 20 de diciembre de 2011

Agua

Empieza primero con un pie, lo sumerge y tras él va el resto de la pierna y más adelante el cuerpo que se deja arropar por una marea de agua que invade todos los rincones de su cuerpo y refresca igualmente las zonas que no toca. Cierra los ojos y va dejando que su boca, su nariz y finalmente toda su melena se mojen. Nota la presión en sus oídos, y la espuma flotando sobre su cuerpo ahora completamente hundido en las profundidades del agua.
Sus pensamientos flotan en el líquido y vuelan con el vapor que desprende, lo aromatizan todo y se mezclan con la realidad. Todo lo irracional que pertenece a la lógica, toda la ilógica que pertenece a lo racional.
Las paredes chorrean y se consumen diluidas en sí mismas. La percepción del tiempo se desvanece junto a la inmensidad del espacio y todo deja de existir en ese preciso instante en el que abre los ojos y mira el cielo que se expande en su frente.
Y lentamente se va sumiendo en ese sueño acuático mientras nota la presencia de algo o alguien que la observa desde las profundidades del abismo.

Nota: y valga la paranoia. Esto me ha costado escribirlo, se me ocurrió esta mañana en la ducha, pero no sabía cómo ponerlo para que ni diera miedo (aún tengo las imágenes en la cabeza, imágenes que estremecen) ni pareciera demasiado erótico ni sobrecargado, y aún así conservara ese trasfondo...
El caso es que tengo sueño y ganas de nadar, y éste texto es lo que ha nacido de esas ganas. El título va por algo mucho más amplio que este fragmentillo automático. Algún día pondré lo que tengo de Agua, pero agua de verdad, no este bañito.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Cosas que se pueden hacer cuando te ataca el insomnio

-Ver la tele

-Ordenar la habitación

-Leer

-Escribir (el problema es ¿QUÉ?, bueno, de la respuesta a esta pregunta nace esta entrada)

-Hacer fotos a todo ser que esté delante de ti (e intentar hacer una volando sobre el sofá. Misión: fallida, sofá pequeño, probabilidad de ostia del año: 99'99999%, demasiado arriesgado. Nota mental: Probarlo en el sofá de Mérida.)

-Saltar en la cama

-Escuchar música que te despierte aún más. En 8tracks.com tienes unas listas estupendas para ello (y para todo)

-Molestar a los vecinos que tanto te han molestado esta tarde y han hecho que te levantes de tu siesta de 4 horas escuchando reggaetón y música chunda-chunda actual

-Componer una canción. A éstas horas viene una inspiración “cantautorística” de campeonato, y además se puede hacer uso de los dos puntos anteriores.

-Elegir a alguien de quien enamorarte (Si no se encuentra a ningún sujeto en condiciones, auto declararse “solter@ de oro”)

-Pensar en algo (De nuevo asalta el ¿EN QUÉ? Bueno, pues puedes pensar en el examen de matemáticas que tienes el viernes, en las navidades, en próximos viajes –entiéndase África, Japón o Interrail-, en la economía mundial –no lo recomiendo, como economista-, en el fin del mundo –cuidadito, existencialistas-, en ELLA/ÉL, en qué pensar)

-Inventarte una nueva coreografía para una canción de Lady Gaga.

Bueno, vale ya, se me está empezando a ir la pinza peligrosamente. Pronto publicaré algo, me estoy enganchando a mi propio blog. Qué triste, ¿no?

Besos somníferos de una vividora pasional.

Espasmo

Nota: Esto es lo que se me ha ocurrido mientras escuchaba música, más concretamente cuatro canciones a cada cual más orgásmica, de ahí lo "lascivo" de la entrada o no. Tal vez sea una inspiración en alguien, a lo mejor solo un desvarío tras una tarde de intensa lectura de Marauder!Crack (Demasiado adictivo como para parar).
Esta es una entrada "No apta para mentes inocentes". Luego no digas que no lo advertí.

Ahora suena: Sail, de Awolnation,;Seven Nation Army (Glitch Mob Remix); Undisclosed Desires de Muse; Back in Black AC/DC; Enjoy The Silence (Linkin Park Remix)

Chasquea los dedos y el mundo se enciende a su alrededor. Una extraña sincronía que hace que los vapores asciendan y hagan explotar al mismísimo universo. Un paso con esas botas negras, siempre confiado en sí mismo, parece que nada va a poder con él jamás, la farola que titubea se enciende a medida que él avanza en el extraño brillo de la extinción del mundo.
Cicatrices recorren su cuerpo y lo bañan en un halo de misterio y un reguero de chicas que caen rendidas a sus pies en cuanto le ven aparecer.
Música extraña y deliciosa que alimenta los impulsos más instintivos, provoca hambre, deseo y satisfacción, locuras que se afanan en el borde de la probeta por provocar una enorme sensación de apogeo, de querer, de poder hacer lo que tienes en tus manos y lo que no.
El ruido del motor que arranca y nota también su estímulo, se sienten mutuos, y juntos, máquina y hombre aplastan la calzada y crean una ola de caos que invita a la creación mediante la explosión.
Espalda que lucha contra el cuero y caderas que se ajustan a pantalones raídos que parecen ir insinuándose ante cualquiera que se cruce en su camino. Amargo como la cerveza, cruel a su manera, su olor es una mezcla entre sangre, alcohol y tabaco que representa todo lo malvado de este mundo.
Una mirada que desnuda más allá de lo literal a cualquiera que ose cruzarse en su camino.
Melena negra, larga, que lo único que pide es una ráfaga de viento frío para poder bailar a su son.
Traquetea con los dedos en la goma del manillar, como un esplendor ardiente que cubre pero no tapa todas sus ansias.
Se detiene todo por un segundo, un silencio momentáneo que da para pensar que todo se va a acabar, pero al pisar el suelo, caminar parece ser ir demasiado lento para él. Corre hasta las escaleras y salta. Mira a su alrededor y corre, sus pulmones contienen más aire del que pueden mantener, y todo a su alrededor es de repente una nube de humo, un borrón y una cuenta nueva en una historia que parece no tener fin. Ni principio.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Té, naranjas y croissant


Entre el vapor, oculta tras la fina persiana creada por el agua en ebullición miró la hora. Esperando, el tiempo pasaba más lento. Miró a su alrededor, estaba en una sala oscura, de tonos cálidos, con mesitas y sillas que junto a la decoración invitaban a sentarse con un viejo amigo de la infancia a charlar y recordar viejos tiempos, o a leer un buen libro, pero no a esperar. Sobretodo si no se sabe a quién se espera, pensó para sí. Bebió un sorbo del té que, a pesar de llevar esperando con ella un rato, aún le quemaba la lengua.
Una corriente de aire frío se colaba por la puerta antes de que unas manos frías, suaves, seguras de si mismas, le taparan los ojos desde atrás, no había tenido tiempo a reaccionar, pero notó el olor a naranja en sus manos.
-Perdona el retraso-dijo mientras sacaba un pequeño paquete del bolsillo- me he entretenido por el camino-y dicho esto, y sin darle tiempo a replicar le entregó el paquete.
Lo miró, algo sorprendida, la curiosidad le invadía pero intentó no exteriorizarlo; simplemente tomó el paquete, un contraste curioso que el roce de sus manos frías entregaran un paquete tibio ante la sorpresa de la chica, que lo contempló, esta vez sí, perpleja.
-Tu favorito-dijo él con una sonrisa

NOTA: Esta entrada, un poco -tal vez demasiado- dulce se me ocurrió mientras estudiaba y comía lo que aparece en el texto. Ha sido algo completamente instintivo, se ha ido escribiendo solo mientras yo me tomaba el té y asistía atónita a un logro de escritura automática que hacía ya mucho tiempo que no me salía.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Insomne

Nota: No es muy tarde, lo sé, pero sí es cierto que padezco de insmonio, forma parte de Madrid. Lo que no sé es si es una maldición o lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo. Después de todo, es un rato (a veces muy largo, otras no tanto) que me dedico a pensar por no poder hacer otra cosa.

Cerró los ojos. Así descansaré al menos la vista y acabaré durmiendo. Se dijo a sí mismo. Era la quinta vez que lo hacía esa noche -como todas las noches antes de lograr conciliar el sueño- pero no se rendía. El cansancio no dejaba que se concentrara si quería hacer cualquier otra cosa, pero a la hora de entrar en la cama no solía dormirse con facilidad, y no lo entendía, y por eso -o por todo- lo odiaba.
Los brazos de Morfeo siempre habían estado ahí cada noche hasta que llegó. Ese cambio inesperado puso patas arriba su vida, y la noche que siempre le había parecido sagrada, protectora y calmante, ahora se le antojaba caprichosa y salvaje. Ofrecía cobijo a todas las criaturas que como él no lograban dormir por las noches. Era realmente absurdo.
Inquieto, se levantó y fue hacia la ventana, aire fresco. Las estrellas permanecían inmóviles ante su profunda visión. El mundo para ellas, el ancho mundo que parece formidable, enorme para los seres humanos no será más que un pequeño punto en un universo prácticamente infinito. La luna, en cambio, hija directa de la noche, ensombrecida por el planeta azul en el que habitamos, se ve condenada a girar a su alrededor eternamente ocultando su lado oscuro, recordándonos que todo tiene otra cara más allá de lo que nuestra visión nos permita ver.
-Apasionante- Dijo en la soledad de la noche - El universo en el que vivimos, y que tanto deseamos por conocer es lo único que nunca podremos entender a lo largo de nuestras vidas... Pero, supongo que es lo mismo que se siente cuando quieres salir de tu propia región sin conocer ésta a fondo. Inevitable, trivial.
Regresó a su cama, cerró los ojos y al momento el pesado manto de Somnus le arropó por última vez.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Memorias de una vividora: Breve introducción

Llámame Lucía. Aunque no es el nombre que aparece en mi pasaporte, me siento más correspondida con este nombre que con el que me dieron mis padres, aunque claro, tengo 18 años y las cosas poco claras.
Sin embargo hay algo que sé con certeza. Nací para conocer. Se conoce mediante la experiencia y ésta te la da la vida. En resumen, nací para vivir. Pero hay muchas maneras de hacerlo y a mí me gusta viajar, la fotografía y las galletas. Es lo que hay.

Soy un bípedo implume y le busco lógica a todo, o mas bien mi mente lo centrifuga todo hasta hacer que pierda sentido. Una locura.
Tengo otro blog, el de "Hoy me siento feliz" pero este es diferente. Es mucho más personal, es posible que no tardes en darte cuenta de que desvarío -y dicen que la locura es contagiosa, pero sana y divertida- aunque esto es también una advertencia a todo aquel que quiera algo sencillo y lineal, porque entonces no es este blog el que busca.

Espero que lo disfrutéis, porque creo que yo también lo haré.

La vida es para los que viven. Los que viven aprenden, conocen y arriesgan. Bienvenido seas si quieres conocer. Si sientes curiosidad por el mundo y si tienes una grave afección de "wanderlust" entonces es posible que tengamos bastantes cosas en común. Disfruta.

Un guiño de una vividora.